Un gol en el minuto 90 de Nico Schulz dio la victoria a Alemania en un partido que dominó en la primera parte, pero en el que estuvo contra las cuerdas por el empuje de Holanda, que igualó un 0-2. Alemania se estrenó con victoria en la fase de clasificación de la Eurocopa 2020 y le dio un respiro al entrenador Johachim Löw, criticado en su país por el juego de su equipo.
El partido comenzó con Alemania monopolizando tanto la posesión de la pelota como las oportunidades de gol, pues tuvo la primera en el minuto 2 con un fuerte disparo de Leroy Sané que obligó al portero Jasper Cillesen a emplearse a fondo. Holanda dio al principio señales de no estar centrada en el partido, con errores en la primera mitad del futuro jugador del Barcelona Frenkie de Jong y del delantero Memphis Depay.
Las buenas sensaciones que estaba dando Alemania dieron sus frutos en el minuto 15. Una galopada por la banda izquierda de Schulz y su pase hacia atrás terminó en las botas de Sané, que aprovechó un tropiezo del central Matthijs de Ligt para quedarse solo delante de Cillesen y batirlo con la zurda con un disparo cruzado.
Holanda, a pesar del gol, pareció reaccionar en ese momento y tuvo dos oportunidades de lujo en las botas de Ryan Babel. La primera la tuvo en el minuto 24 gracias a un despiste de la defensa alemana, pero su disparo a media altura fue despejado magistralmente por Manuel Neuer, que esta noche justificó su presencia en el once inicial. La segunda, tres minutos después, fue un remate desde el borde del área pequeña con la pierna derecha, pero el guardameta del Bayern Múnich volvió a salvar el gol gracias a su buena colocación bajo los palos.
Sin embargo, una genialidad de Sané significó el segundo tanto de Alemania en el minuto 34. El jugador del Manchester City tomó el balón por la banda izquierda, dejó a dos hombres atrás y desde el borde del área hizo un disparo de rosca que tocó el larguero antes de terminar en el fondo de la red.
El golpe dejó a los neerlandeses groguis, pues los germanos tuvieron hacia el final de la primera parte otras dos peligrosas ocasiones que habrían podido sentenciar el partido, pero los jugadores se fueron al descanso con el 0-2 en el marcador.
Algo tuvo que decirles Ronald Koeman a sus jugadores en el vestuario, ya que éstos salieron enchufados en la segunda parte, como si fueran once hombres diferentes a los de los primeros 45 minutos. Ese empuje cosechó un resultado casi instantáneo.
Tras un córner, Depay volvió a tomar la pelota para hacer un centro perfecto y encontró la cabeza de De Ligt, quien impuso sus 1,89 metros de altura para marcar el primer gol de Holanda. Los locales se volcaron sobre la portería de Neuer, cuya defensa sufría un horror en los córneres, y se preocuparon tanto por mantener la posesión, cosa que no habían hecho en la primera parte, como de generar ocasiones peligrosas.
El segundo de la "naranja mecánica" era cuestión de tiempo y llegó por medio de Depay en el minuto 63. El delantero del Olympique de Lyon recibió el balón en el área de espaldas, se trastabilló y lo perdió, pero quedó a los pies de Georginio Wijnaldum, que se lo devolvió a Depay y éste, al primer toque, disparó raso y por la izquierda, batiendo a Neuer.
Holanda no quiso conformarse y siguió con las líneas adelantadas, haciendo sufrir a Alemania cada vez que quería salir de su propio campo en los siguientes minutos. Depay tuvo alguna ocación más, pero no fue capaz de marcar otra vez.
Cuando los dos equipos parecían conformarse con el empate, Gündogan, que llevaba 20 minutos en el campo, se internó entre la defensa holandesa, dio un pase atrás a Schulz y éste, sin parar la pelota, marcó el gol que le dio los primeros tres puntos Alemania en la fase de clasificación de la Eurocopa 2020.