Un gol agónico de José Camacho en el minuto 94 dio vida al Huesca, que empató 2-2 frente al Getafe para mantener intacto su sueño de alcanzar la eliminatoria definitiva para ascender a Primera División.
El Huesca sufrió para conseguir un empate sobre la bocina. Tenía casi todo perdido después de los dos goles de Jorge Molina, que a quince minutos para el final completó un doblete que parecía definitivo. Sin embargo, Camacho, con un cabezazo decisivo, se vistió de héroe para su equipo en el último instante.
Getafe y Huesca nunca habían disputado una eliminatoria para ascender. Los primeros, después de un descenso doloroso la temporada pasada, afrontaron esta opción de ascenso tras quedar tercero en la fase regular de segunda división.
La posibilidad de subir el año del descenso no está al alcance de muchos y el conjunto madrileño no quería dejarla escapar. Enfrente, el Huesca, que fue sexto en el torneo de la regularidad, se tenía que ver las caras frente a uno de los favoritos para llegar a Primera División. El cuadro de Juan Antonio Anquela se encontraba ante una cita histórica y su afición respondió llenando el estadio de El Toralín.
En un ambiente muy especial, el Getafe se arrugó durante los primeros veinte minutos. El conjunto aragonés no dio ni un respiro a los hombres de José Bordalás, que volvía al banquillo después de cumplir una larga sanción. Y, desde ese banquillo, vio como su equipo tardó en quitarse de encima el dominio del Huesca, auténtico agitador del choque durante la primera parte.
En ella, el Getafe jugó con fuego y en ocasiones se empleó con excesiva dureza para frenar las acometidas del conjunto aragonés. Faurlín se jugó la expulsión con una entrada que pudo ser la segunda amarilla y Sergio Mora y Chuli también pecaron de excesivo ímpetu que pudo costar caro al cuadro azulón. En medio de la siesta azulona, Samu Sáiz fue el jugador que más incordió al Getafe y dispuso de alguna ocasión para abrir el marcador.
Lo pudo hacer en el minuto 14, después de un contragolpe que frenó Vicente Guaita, y casi al final, tras desaprovechar un pase de Gonzalo Melero que acabó mansamente en las manos del portero del equipo de Bordalás.
El Getafe, sin ocasiones, se marchó al vestuario con un mal sabor de boca que se quitó de encima en la reanudación. La aparición de Jorge Molina, máximo goleador en Liga con 20 tantos esta temporada, y de dos de sus socios, Fuster y Portillo, encarrilaron la eliminatoria para el club madrileño.
Primero, con un penalti claro que transformó del delantero azulón. Lo cometió Akapo sobre el mismo Molina, que sacó petróleo de un gran pase en profundidad de Fuster. Después, a quince minutos del final, con un gran cabezazo a pase de Portillo desde la banda derecha.
Los dos tantos del Getafe parecían una clara sentencia para el Huesca, que sin embargo se repuso enseguida con un tanto del brasileño Vinícius Araújo al minuto del 0-2. El delantero sudamericano aprovechó un mal despeje de Damián Suárez para batir a Guaita y dar esperanzas al Huesca.
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Entonces, durante el último tramo del choque, el equipo de Anquel se lanzó a por el empate. Lo pudo lograr con un remate de David Carlos que salvó Guaita con una mano providencial, pero al final fue Camacho, con un cabezazo en el último suspiro, quien lo consiguió. No hay nada decidido. El Coliseum Alfonso Pérez tendrá la última palabra.
