El Leganés ha sumado su primera victoria en Butarque en Primera División (2-0) ahondando en la crisis de un Osasuna en una noche de estrenos en Butarque en la que Rober Ibáñez brilló con luz propia con un doblete, aunque tuvo que marcharse en los minutos finales con molestias en la rodilla.
En cuestión de cinco minutos, el extremo materializó su primera diana como pepinero en su debut como titular. El valenciano gozó de espacio y tiempo para empalar un balón muerto en el área después de que Gabriel Pires llegara muy forzado a rematar un centro lateral, abriendo así el camino desde el comienzo hacia el primer triunfo blanquiazul en casa.
La llegada de Caparrós no supuso la reacción deseada en Osasuna, puesto que los rojillos se mostraron incapaces de inquietar la meta de Serantes. Entre tanto, Gabriel Pires y Luciano se gustaron con filigranas que solamente se encontraron con el impedimento de Nauzet bajo palos.
El portero evitó males mayores para los visitantes, pero no pudo hacer nada en un mano a mano ante Ibáñez tras un control orientado exquisito. El 2-0 encarriló sobradamente el encuentro para los madrileños, pero unos minutos finales que debieron ser tranquilos resurgieron los males locales en forma de lesión, como fueron los casos de Diego Rico y el propio Ibáñez, protagonista tanto para lo bueno como para lo malo.
De esta forma, el cambio en el banquillo no frenó la mala dinámica osasunista, manteniendo la penúltima posición liguera. Sin embargo, el Leganés acabó con el mal fario en su estadio y consiguió que a la sexta oportunidad fuera la vencida, al igual que un colchón de cuatro puntos respecto al descenso.