Messi puede estar tranquilo. Bienvenidos a la copa de fútbol entre robots. La competición donde la perseverancia es fundamental y donde si te caes, levantarte es una obligación.
Es cierto que no les sobra calidad, pero al igual que en la vida real, los 'piscinazos' y las faltas también aparecen en este particular deporte.
Aquí el agua y las bebidas energéticas se cambian por una buena recarga. Un aporte eléctrico que les permita seguir por el campo asistiendo y en el mejor de los casos anotando gol.
Según la empresa responsable de este evento, en 2050 estos robots podrían enfrentarse a futbolistas de verdad... aunque visto lo visto, queda claro que aún queda mucho trabajo por delante.