El 'caso Zozulya' está cerca de llegar a su final. Y atendiendo a las declaraciones del jugador en TCH.ua, medio de su país, ese final está claro. El ucraniano dejó caer en una entrevista que tiene decidido decir 'no' al Rayo Vallecano y seguir entrenándose con el Real Betis aunque no pueda jugar. Y es que el delantero no confía en que el club y las respectivas instituciones puedan garantizar la seguridad de su familia.
"Me dieron la opción de entrenarme con el Betis sin poder jugar y de probar en el Rayo dos o tres semanas a ver si no pasaba nada. ¿Probar? No parece que sea garantía de seguridad. ¿Pueden garantizar que mi hija va a estar bien en el parque? Entre familia y fútbol, la familia es lo primero. La respuesta sobre si volver o no al Rayo es clara y directa".
El ucraniano además cree que el Rayo ni siquiera quiere que vuelva: "Vi en los ojos de los directivos que no quieren que vuelva. Tienen miedo. Temen que me pase algo y se vuelva en su contra".
Además, Zozulya vuelve a negar que sea nazi: "Me llaman fascista por apoyar al ejércido de mi país pero toda Ucrania lo apoya. Yo no voy a abandonarles. Intenté hablar con los hinchas del Rayo pero no quieren entender".
Su padre, indignado
Obligan a un niño de cinco años a quitarse la camiseta del Espanyol para poder entrar en el campo del Girona
"El bebé se ha tenido que quitar la camiseta del Espanyol porque dicen que con ella no puede entrar. Terriblemente peligroso. Pueden morir todos. Un niño de cinco años", se escucha decir a su padre.