Es un ejemplo de superación. Este piloto que participa en un Rally de Derrapes disputado en Polonia no es como el resto. Hace unos años perdió los brazos en un accidente de moto, y desde entonces ha adaptado su conducción... ¡para hacerlo con los pies!
Maneja el volante con una maestría asombrosa tan solo usando su pie izquierdo, con el derecho se encarga del freno y del acelerador, y con un movimiento de hombro cambia de marcha.
Buscó la manera de poder seguir conduciendo y lo consiguió, dejando en evidencia que es un prodigio del pilotaje y que su capacidad de superación está en otro nivel.