Brazada a brazada, Carlos Peralta se prepara para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Serán los primeros a los que acudirá más liberado, dice él, tras reconocer su homosexualidad. "Contarlo, ahora, supone una liberación personal. Poder gritarlo y decirlo publicamente, se acaban los rumores y habladurías", reconoce el deportista.
Pero, tomar esta decisión, asegura, no ha sido nada fácil. "Me he encontrado gente que no veía necesario que lo contase porque decía que no hay diferencia entre un deportista gay y uno heterosexual", explica. Este paso tan importante lo ha dado por un motivo claro: "Llegar a entender que no eres diferente, que estás arropado por mucha gente y que puede seguir adelante siendo la persona que quieres ser".
Peralta se suma a una reducida lista de deportistas españoles que han declarado abiertamente su homosexualidad. Uno de los primeros fue Víctor Gutiérrez. "Me sentía con la responsabilidad de dar un paso al frente y compartir con el resto de la gente mi experiencia, que es muy positiva", reconoció en unas declaraciones de 2016.
La misma decisión tomaron Pedro y Óscar, que por ser gimnasta y bailarín, respectivamente, han sufrido todavía un mayor rechazo. "Hay muchos chicos que están intentando competir a nivel internacional y que no pueden porque no está bien visto", indica Pedro mientras que Óscar señala que "hubo una época" que, incluso, quiso dejar su deporte "porque escuchar la palabra 'mariquita' te puede doler en una época de tu vida".