Lo que más preocupa a los griegos es cuándo acabará el corralito. Los bancos volverán a abrir este lunes, pero se mantiene el control de capitales. El economista Juan Rallo asegura que "hasta que no se recapitalicen los bancos y regrese la confianza en Grecia va a ser complicado abrir el corralito porque la gente sacaría masivamente el dinero".

Este lunes se entregará a Grecia el crédito puente de más de 7.000 millones a la espera del rescate, un préstamo para pagar otros préstamos, entre ellos, el que vence este lunes con el Banco Central Europeo. "Si no se le hubiera dado el crédito Grecia hubiera quebrado y habría tenido que salir de la zona euro", asegura Rallo.

El director de la Escuela de Finanzas, Alejandro Inurrieta explica que "es un dinero que viene a Grecia para luego volver a las instituciones europeas." Algo similar pasará con el tercer rescate que se empezará a negociar esta semana.

De momento, se habla de entre 82.000 y 86.000 millones de euros. La mayor parte del dinero lo pondrán los países europeos y se dedicará, fundamentalmente, a pagar la deuda y los intereses que genera. 25.000 millones irán a recapitalizar los bancos y sólo un 15 % del total se destinará a estimular la economía griega.

A cambio, Grecia tendrá que seguir haciendo políticas de austeridad que, dicen los expertos no funcionar para reactivar su economía. Gonzalo Bernardos, profesor de la Universidad de Barcelona explicaba en laSexta Noche que "en todos los países que se han aplicado los recortes de Merkel han ido sumamente a peor, y en el caso de Grecia no se ha solucionado su peor problema, que su economía no es competitiva".

Queda por ver si Tsipras acaba consiguiendo su objetivo incial, un acuerdo para reducir su deuda. "Lo que le hace falta a Grecia es una quita de deuda. Esa sería la única medida que puede ayudar", asegura Inurrieta. Una necesidad que ya ha puesto sobre la mesa el FMI pero de la que Alemania no quiere ni oír hablar.