Gerardo Díaz Ferrán convenció a la familia Ruiz Mateos para que se pusiera en manos del liquidador Ángel de Cabo. Sería la prueba de que el ex presidente de la CEOE, no era alguien ajeno a de Cabo. Así lo manifiesta el ex abogado de Rumasa, que además afirma que De Cabo investigaba a jueces y administradores, para después chantajearles.

Gerardo Díaz Ferrán no buscó un mero testaferro en Ángel De Cabo. Iban de la mano y se granjeaban los pelotazos mutuamente.  Lo ha contado hoy en Espejo Público  Joaquín Yvancos, el ex abogado de los Ruiz Mateos.  Fue el expresidente de la CEOE quien convenció a Ruiz Mateos padre de que se fiara de Ángel de Cabo.

Pero por los métodos de De Cabo, más que un pacto entre caballeros era un chanchullo propio de la mafia. Según Yvancos, Ángel de Cabo se autodenominaba ‘Rata de juzgado’ y presumía de coaccionar incluso a los jueces si se interponían en su camino.

“Cuando me opuse a la operación, De cabo me dijo que mis hijos fueran con cuidado”, relata el abogado. Una amenaza que no fue suficiente para impresionarle. Yvancos siguió oponiéndose a la operación y De Cabo pasó a la acción.

Ésa parece que fue la forma de actuar de un antiguo fontanero que se hizo multimillonario y que ahora duerme entre rejas con la fianza más alta de la historia en España.