El Gobierno portugués ha advertido de que la decisión del Tribunal Constitucional luso de anular varias de las medidas de ajuste aprobadas en sus Presupuestos para 2013 coloca en riesgo al país al poner en causa su "credibilidad externa".

El primer ministro conservador, Pedro Passos Coelho, decidió además solicitar una reunión "de urgencia" con el jefe de Estado, Aníbal Cavaco Silva -que pidió el dictamen del tribunal- para obtener "una rápida clarificación del Estado sobre relevantes aspectos puestos en causa por la sentencia".

Los jueces consideran ilegal retirar la paga extra de verano a los funcionarios y los pensionistas. No es equitativa porque no pueden ser ellos los únicos que afronten los sacrificios del país. También quedan anulados las rebajas en los subsidios de desempleo y enfermedad.

Ahora queda saber cómo va a afrontar el Gobierno el recorte que exige la troika. En España, el PSOE ya ha pedido a Rajoy que tome nota del varapalo judicial a los recortes en el país vecino.