En total, el número de deudores concursados, tanto familias como empresas, fue de 2.854, un 22,8% más que en el primer trimestre de 2012 y un 10,4% más en tasa intertrimestral.

Del total de concursos registrados hasta marzo, 2.727 fueron voluntarios y 127 necesarios.

El 25% de las empresas que entraron en concurso de acreedores entre enero y marzo tenían como actividad principal la construcción, mientras que el 17,1% se dedicaban al comercio y el 16,3% a la industria y la energía.

Prácticamente una de cada cuatro empresas que se declararon en quiebra tenía una antigüedad de 20 o más años, mientras que el 12,4% tenía cuatro años o menos de vida.

La mayor parte de las empresas concursadas del primer trimestre eran sociedades limitadas, con un crecimiento del 33,7% sobre el mismo periodo de 2012.

Por comunidades, Cataluña, Baleares, Madrid y Comunidad Valenciana fueron las comunidades con mayor número de declaraciones de concurso.

En el lado opuesto, las regiones con menos suspensiones de pagos en el primer trimestre del año fueron Cantabria, La Rioja y Navarra.