El pleno del Parlamento Europeo (PE) vota hoy aumentar un 40 % el presupuesto para el llamado programa Erasmus de movilidad de jóvenes, válido para 2014-2020, que incluye la conocida Erasmus entre otras becas y opciones de estudios, prácticas, voluntariado y deporte.

El presupuesto total del programa Erasmus  que aprobaran previsiblemente los eurodiputados eleva a más de 14.700 millones de euros el presupuesto, incluyendo una partida de movilidad universitaria de 4.920 millones de euros.

El nuevo programa Erasmus establece cuantías mínimas para las becas de los estudiantes dependiendo de sus destinos, cuyo cálculo se basa en el nivel de vida de cada país. En el caso de los Erasmus españoles, las becas mínimas serán de 150 euros mensuales para países donde el coste de la vida sea inferior a España (como Bulgaria, Rumanía o Letonia), de 200 euros para países con un nivel similar (Alemania, Bélgica u Holanda) y de 250 euros para aquellos con un nivel superior, como Francia, el Reino Unido o Noruega.

Según fuentes de la Comisión Europea, España "quiere al menos mantener el número presente de Erasmus en 2014" pese al aumento de las ayudas europeas que este país recibirá en dicho año, del 4,3 %.

La comunidad de estudiantes Erasmus españoles celebró el pasado fin de semana movilizaciones en diversas ciudades de toda Europa para protestar contra la incertidumbre en torno al futuro de estas becas, que en el caso de España son actualmente las más bajas de toda la Unión Europea.

Durante las dos últimas semanas, las dudas sobre los planes del Ministerio de Educación para las becas Erasmus han suscitado críticas del sector educativo, de las comunidades autónomas e incluso del Ejecutivo comunitario.

La Comisión ha aclarado los efectos de la nueva normativa sobre las futuras becas Erasmus, descartando tajantemente efectos perjudiciales sobre el número y la cuantía de las ayudas. El aumento del presupuesto para el próximo programa Erasmus forma parte del marco financiero plurianual global para 2014-2020.

Los países y el PE pactaron en junio un austero presupuesto de 959.990 millones de euros en compromisos y 908.400 millones como techo de pagos para los próximos siete años, en el que las mayores partidas corresponden a las políticas de cohesión y agricultura.