El número uno en el ránking de las fianzas que ha impuesto Andreu es José Antonio Moral Santín. El exconsejero a propuesta de Izquierda Unida tendrá que abonar 610.00 euros. La distancia con el número dos es considerable. El puesto lo ocupa Francisco Baquero, exsindicalista de Comisiones Obreras, con 356.00 euros.

Le sigue muy de cerca el exsecretario de Estado de Hacienda, Estanislao Rodríguez Ponga, que tiene que depositar  una fianza de 341.000 euros. En total son 4,3 millones los que ha impuesto el juez Andreu a 21 exconsejeros. Y les da tres días para que los paguen antes de empezar a embargarles bienes.

"Complemento retributivo", "gastos personales", "todo tipo de gastos", "total libertad" o "gastos discrecionales". En el auto Andreu asegura que durante las declaraciones ha escuchado tantas justificaciones como consejeros han pasado por la Audiencia. Y  a juzgar por sus palabras, ninguna le ha convencido: "No es de recibo que distintos consejeros hayan manifestado que nadie les llamó la atención por su uso.  La simple condición de consejero (...) presupone el conocimiento de que no se puede entender como aceptable la entrega de una tarjeta de crédito para su uso discrecional".

El juez se apoya para afirmarlo en el hecho de que Francisco Verdú, el exconsejero delegado de Bankia, nunca usó su tarjeta, y avisó de que era una mala praxis.

Hay seis consejeros que sí usaron la tarjeta pero a los que no se les ha impuesto fianza. La razón es que han devuelto el dinero. Aunque supone una parte muy pequeña. Entre ellos está el expresidente de los empresarios madrileños, Arturo Fernández.