Paula y Noemí decidieron emprender hace tres años. Pero hasta que su empresa de organización de eventos vio la luz, todo eran obstáculos. Hoy, dudan de la eficacia del paquete de medidas aprobado ayer por el Banco Central Europeo.

En el Banco de España sí confían en la artillería de Draghi. Y creen que sus efectos serán inmediatos. “Una zanahoria de buen comer” que, si finalmente muerden los bancos, podría tener otras consecuencias.

No son las únicas. Porque la rebaja histórica de los tipos de interés conlleva una bajada del Euribor. Y eso hará que paguemos algo menos de hipoteca. Menos ventajosa es para los ahorradores, que pasarán a obtener menos rentabilidad por sus depósitos bancarios.

Si las balas de Draghi consiguen debilitar el euro, también lo notaremos al llenar el depósito. Pagaremos más por el petróleo, lo que supondrá un encarecimiento de los carburantes.