Susana y la pequeña Carmen comparten espacio de trabajo para una y juegos para otra. Es la libertad que le ofrece la empresa en la que trabaja, puede llevar a su hija a su puesto hasta que ella lo considere oportuno.
Susana Márquez explica que su hija ha estado en "ruedas de prensa, reuniones firmas de convenios…". Pero no todas las profesiones permiten conciliar la vida laboral con la familiar. A Yolanda Velaz, enfermera, no le fue nada fácil poder seguir con la lactancia de su hija Leyre.
En su caso se "sacaba la leche antes de irme, luego tenía que buscar huecos para volver sacarme la leche". La legislación actual sólo marca unos mínimos en cuanto a las bajas de maternidad, paternidad o lactancia y las mejoras dependen únicamente de la voluntad de las empresas.
El grupo Santander es una de las empresas que facilita la conciliación. Sus 190.000 empleados en todo el mundo se benefician de horarios flexibles, teletrabajo o actividades familiares con sus pequeños dentro de la empresa, y eso repercute también en la productividad.
La directora de Recursos Humanos del Grupo Santander asegura que el compromiso de sus empleados "ha aumentado y eso hace que al final atiendan mejor a los clientes, porque hay trabajadores mucho más comprometidos". Para las 6.000 personas que trabajan, además, en su ciudad financiera tienen una guardería cuyo coste está en parte cubierto por la empresa.