La inflación general repuntó en abril hasta el 4,1%, ocho décimas por encima de la registrada en marzo, según el avance del Índice de Precios de Consumo (IPC) publicado este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que no obstante refleja un descenso de la inflación subyacente de nueve décimas, situándose así en el 6,6%.
El INE atribuye la subida del indicador adelantado del IPC, principalmente, a que el descenso de los precios de la electricidad es menor al que se registró en abril del año pasado, así como al aumento de los carburantes, que bajaron en abril de 2022, coincidiendo con la entrada en vigor de la bonificación a los combustibles.
No obstante, destaca que los precios de los alimentos y bebidas no alcohólicas aumentaron menos este mes que en abril del año pasado. De esta manera, la tasa de variación anual estimada de la inflación subyacente -sin alimentos no elaborados ni productos energéticos- disminuye casi un punto, hasta el 6,6%.
En términos de evolución de la tasa mensual, los precios de consumo han registrado en abril una subida del 0,6% respecto a marzo, según el indicador adelantado del IPC.
"La inflación subyacente ha bajado casi un punto en abril gracias a la ralentización del precio de los alimentos y, como preveíamos, la inflación general ha repuntado por el efecto base", ha valorado al respecto la vicepresidenta económica, Nadia Calviño.