Nicolás se ha hecho pasar por un alto cargo con contactos en el Gobierno y en la Casa Real. Ha mantenido reuniones con Aznar y hasta llegó a colarse en la audiencia del nuevo rey, que le llevó a la cúspide de su engaño. Prometía inversiones multimillonarias gracias a sus contactos como Villar Mir, la alcaldesa Ana Botella, Esperanza Aguirre o Rodrigo Rato.

Tal y como pueden ver en el vídeo, Nicolás, el joven de jersey azul que mira de reojo a Arturo Fernández era en ese momento apoderado en las elecciones de la patronal madrileña. Es aquí cuando comprobamos todos sus trucos para aparecer en todas las imágenes: le vemos quieto, abrazándose detrás del enfoque de las cámaras con los empresarios, andando por detrás o incluso metiéndose en la conversación.

No se coló en este acto pero sí lo hizo en otros muchos. Según la jueza, para aparentar ser un alto cargo bien relacionado con personalidades del mundo político y económico y así ofrecer suculentos negocios. La jueza ha destacado que: "Esta instructora no acierta a entender cómo un joven de 20 años puede acceder con su mera 'palabrería'a los actos a los que acudió sin 'alertar' de su conducta a nadie".

Una palabrería con la que consiguió acceder incluso al rey el día de su proclamación. Fue detenido el martes y ya lo han puesto en libertad provisional sin fianza. Porque según la magistrada: "En el informe médico forense se observa en el detenido 'una florida ideacción delirante de tipo megalo-maníaco'".

Tanto que se hizo pasar por un representante de la Casa Real en Ribadeo, Galicia. Con aparentes coches oficiales y escoltado, como se puede ver en el vídeo, tranquilo, jugando con la cámara y enseñando el paisaje.

El alcalde de Ribadeo, Fernando Suárez,  fue advertido de la noticia: "Llamaron para pedirnos si podíamos escoltar a un coche de una autoridad relevante de la monarquía". La autoridad era Nicolás que comió en un restaurante con un empresario, "me acerqué a saludar por si era alguien de la Casa Real", ha confirmado el alcalde.

Y no fue su único papel. Según el auto, en otra ocasión se hizo pasar por asesor de la vicepresidenta del Gobierno y logró que le entregasen 25.000 euros. Prometiendo que el Gobierno mediaría en la venta de un inmueble en Toledo.