Finalmente, Rodrigo Rato ha conseguido un aval bancario para afrontar la fianza de tres millones de euros impuesta por el juez Andreu. Así el expresidente de Caja Madrid no tendrá que hipotecar ninguna de sus propiedades ni perder parte de su patrimonio.

El que puede no correr la misma suerte es Miguel Blesa. El expresidente de Caja Madrid ya vendió parte de su patrimonio el año pasado antes de su ingreso en prisión. En concreto un piso, formado por dos fincas, situado en una zona cercana al Bernabéu de 180 metros cuadrados y valorado en 600.000 euros. También se deshizo de parte de una finca familiar que tenía en Jaén y que donó a la Iglesia, y de otro chalet de lujo que poseía en Madrid.

Aunque se ha desprendido de algunas propiedades, Blesa aún mantiene un jugoso patrimonio embargable formado por: un chalet de 700 metros cuadrados en la lujosa urbanización madrileña de La Florida, otro chalet de 350 metros cuadrados en la sierra madrileña y parte de una casa familiar en Jaén. El valor estimado de las propiedades sería de cuatro millones de euros. Además, contaría con siete millones de euros invertidos en Bolsa y gestionados por Bankia.

Ante la posibilidad de embargo, Blesa ha vuelto a insistir a su aseguradora Mapfre, de la formó parte en su Consejo de Administración, que se haga cargo de la fianza antes de que finalice el plazo.