Al contrario de lo que se piensa, cada vez menos españoles ven en trabajar por cuenta propia una solución temporal. De los 3.200.000 autónomos que hay en el país, uno de cada cuatro lo es desde hace más de 15 años. Además, el 46% de ellos han visto cómo sus empresas crecían y les permitían contratar empleados.
La mayor parte de ellos ven en las cargas sociales y administrativas y la presión fiscal el principal de sus problemas. María es una de ellas. Abrió su salón de belleza hace cinco años y lo único que no le gusta son los impuestos. Son "muchos", asegura.
Tampoco se muestran satisfechos con las ayudas que reciben. Iñaki, que lleva 18 meses en el autoempleo, asegura que "tardan en llegar" y algunas "no llegan".
Lorenzo Amor, presidente de la Federación Nacional de Trabajadores Autónomos (ATA), explica que ahora "muchos autónomos se lo piensan y no emprenden a tonta y a loca". "Se juegan su paro", justifica.
Más de uno de cada tres autónomos, el 35,3%, son mujeres, frente al 64% de hombres. Además, casi la mitad de ellos, el 42,7%, están entre los 36 y 49 años y el 35,9% se dedican al sector servicios.
Una misión casi imposible
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