Un supermercado en un barrio humilde en el extraradio de Atenas. Andreas tiene 4 hijos, lo que es lo mismo cada compra es un carro lleno, ahora distinto, con previsión, asegura que ha "comprado casi el doble de lo que compro normalmente y he gastado 60 euros". Ha gastado íntegros los 60 euros que acaba de sacar del cajero. No hay dinero para más gastos.
Otros clientes no encuentran todo lo que buscan. Una mujer que va a comprar explica que al ir al supermercado vieron "que todos los puestos de pasta y arroz están casi vacíos". Otro asegura que de lo que necesitaba "no hay nada, está todo vacío". En otro supermercado, con algún hueco ya en sus estanterías, cuentan que esta semana la soga aprieta un poco más y que "todas las entregas se hacen en efectivo, y si no pagas no te llegan y si no tienes consumidores no puedes pagarles".
Gabril, el encargado de una gasolinera aseguro que aunque "no hubo problemas graves, pero todo el mundo entró en pánico y llegaron a centenares y se notó mucha más gente". Gasolineras con más clientes, con más litros servidos. Otros convierten todos los billetes que llevan en la cartera en combustible por el miedo. Un cliente asegura que les han tenido con tanto terror "que he venido a la gasolinera para echar toda la gasolina para no quedarnos sin recursos".
El hospital hipokrátio ha mandado una carta oficial al ministerio de Sanidad advirtiendo que debido a la poca liquidez tendría que restringir las dietas de los pacientes y empleados. Papanikolau Angelos, un médico del hospital, consciente de la delicada situación explica que "dentro de poco habrá falta de materiales quirúrgicos y de alimentación".
Hay farmacias que han tenido problemas con los distribuidores. Stazis regenta una que además también es Ortopedia y ya nota las consecuencias del sexto día de corralito ya que "por una parte la gente no consume nada y por otra de nuestros proveedores no tenemos ninguna entrega". Viven los griegos entre temores y los primeros síntomas del corralito que esperan no acabe convirtiéndose en una enfermedad crónica.
Una auténtica vergüenza
Zulos vendidos como 'casas': los vergonzosos anuncios de presuntas viviendas a precios disparatados
Las plataformas de compra-venta de viviendas recogen algunos 'chollos' que muestran el drama que supone encontra una casa digna a un precio accesible. Hay zulos de 10 metros cuadrados vendidos por más de 100.000 euros.