La vicepresidenta segunda del Gobierno, Nadia Calviño, descarta ahora modificar el impuesto a la banca, tras abogar el pasado viernes por revisarlo y, en su caso, ajustarlo. Unas palabras que provocaban un nuevo choque con la vicepresidenta segunda y líder de Sumar, Yolanda Díaz, que este mismo fin de semana instaba a cumplir el acuerdo de gobierno.
Este lunes, sin embargo, Calviño ha negado que se vaya a tocar el tributo: "No hay ninguna novedad", ha asegurado. "Mis palabras han sido las mismas que he dicho desde el primer día y las que ha venido expresando nuestro Gobierno, que están absolutamente alineadas con lo que prevén las leyes de los impuestos y lo que prevé el acuerdo de gobierno", ha defendido la titular de Economía.
El domingo, y a pesar de lo dicho por Calviño, fuentes de Economía ya apuntaban que el Gobierno no contempla modificar el impuesto a la banca en estos momentos. El viernes, no obstante, la vicepresidenta primera defendía, en declaraciones a 'Antena 3', que a su juicio era "el momento de revisar y ver si hay que ajustar algunos los parámetros en el nuevo escenario en el que estamos".
"Tenemos que ver si esos dos impuestos hay que hacer algún ajuste o no", indicó, aludiendo también al impuesto sobre los beneficios extraordinarios de las empresas energéticas.
Unas declaraciones que no gustaron nada a la titular de Trabajo, que el sábado instó a sus socios en el Ejecutivo a "cumplir el acuerdo de gobierno y mantener el impuesto a la banca", criticando que "las familias sufren y ellos se están forrando". Un nuevo frente con Calviño que se sumaba al abierto hace unas semanas a raíz de las propuestas de sus respectivos departamentos para reformar el subsidio de desempleo.
Una misión casi imposible
Alquilar un piso, una misión casi imposible: "Dijimos que éramos pareja y ni aún así nos llamaron"
Encontrar piso de alquiler es ahora mismo una auténtica aventura, desde conseguir una cita, hasta las decenas de pruebas y papeleos que te exigen para quedarte con la casa. Tener dinero no es el único requisito; los que tienen niños o perros, por ejemplo, lo tienen casi imposible.