La Conferencia Episcopal Española (CEE) recibió del Estado 992,4 millones de euros entre 2011 y 2014 gracias a la asignación tributaria. Sin embargo, sólo destinó 21 millones (un 2,12%) a Cáritas durante ese periodo, el más duro de la crisis, según recoge el diario 'Público'
El resto del dinero obtenido gracias al IRPF fue para sufragar los gastos de las diócesis, la Seguridad Social del clero, el sueldo de los obispos y la actividad pastoral.
Cáritas, desplegada a través de 6.000 delegaciones parroquiales y 70 diocesanas, se dedica a luchar contra la pobreza y exclusión, que se han incrementado en España a lo largo de los últimos años. Como consecuencia, ha tenido que movilizar más recursos, procedentes tanto del sector público como del privado.