Justo cuando se cumplen 35 años de su militancia en el PP, Rodrigo Rato se juega la permanencia en el partido tras el escándalo de las tarjetas 'opacas' de Caja Madrid. Mientras se decide si se le abre un expediente informativo y se le expulsa cautelarmente del partido, los populares se dividen entre los que defienden que es pronto para tomar decisiones y los que prefieren no hablar antes de tiempo.

Por su parte, Rato no quiere marcharse sin defenderse. En una entrevista en Radio Nacional ha asegurado que no piensa renunciar a la militancia y que en el PP no le han pedido explicaciones hasta este lunes.

Rodrigo Rato lo fue todo para el Partido Popular: hombre de confianza de Aznar, llegó a ser vicepresidente del Gobierno, Ministro de Economía y un firme candidato a la sucesión del expresidente al que Rajoy desbancó en el último momento.

Rato dejó la política española para presidir el FMI, hasta que dimitió por sorpresa justo antes del estallido de la crisis. En 2010 cogió el testigo de Blesa para dirigir Caja Madrid y la creación de Bankia, un gigante con pies de barro cuya salida a Bolsa le ha costado su imputación por estafa y apropiación indebida. Ahora su imputación por el escándalo de las tarjetas podría costarle su salida del PP.