“Esta sera una oportunidad única de impulsar los servicios transatlánticos, y las tarifas comenzarían desde los 10 euros” ha dicho el presidente del la compañia irlandesa Michael O’Leary en el Paris Airshow.

Esto significaría que la compañía irlandesa comenzara un nuevo negocio que ya inició en su momento Laker Airways, que empezó a operar desde Londres a Nueva York a finales de los años 70 por bajos precios, aunque finalmente la compañía quebró en 1982.

Los vuelos baratos de largo recorrido se han convertido populares en Asia en los últimos años gracias a la compañía malaya AirAsia X; la australiana Jetstar Asia, en su base afiliada en Singapur; y Singapore Airlines.

O’Leary dijo que el negocio de los vuelos baratos de largo recorrido tiene que llevarse a cabo separadamente de su negocio principal para tener éxito, ya que  así, de esa forma, se permite que la dirección y el equipo de los vuelos de corto recorrido puedan dedicarse plenamente a su labor.

Además, estos servicios 'low cost' de largo recorrido necesitan para comenzar a operar una flota de 30 a 50 aeronaves, necesarias para obtener economías de escala.

“Hay una oportunidad para Europa y Estados  Unidos de una apertura a gran escala, conectando unas 20 ciudades europeas con 15 de las más grandes ciudades norteamericanas desde casi el primer día. Pero necesitamos una flota de 30, 40 o 50 aeronaves, no dos, tres o seis” dijo O’Leary.

El modelo de negocio es diferente al de los vuelos cortos, los cuales se basan en ofrecer tarifas bajas en líneas que operan con una alta intensidad, con solamente una clase turista, en naves Boeing 737. Los pasajeros tienen que pagar extras como por ejemplo, si quieren obtener mejores asientos o facturar maletas.

Sin embargo, en un servicio de largo recorrido, por ejemplo, puede  acceder a una zona ‘premium’, tal y como ofrecen las líneas aéreas asiáticas. “Hay un 15% del público que pagaría por estos extras y sería una locura no ofertarlas” dijo el presidente de la compañía irlandesa.

Sin embargo, no es tarea fácil obtener beneficios de estas líneas de largo recorrido, como se puede ver en el caso de Laker Airways, que comenzó una recesión al comienzo de los 80, y mientras los competidores directos recortaron el precio de pasaje para obtener más pasajeros, su demanda descendió.

También se ha cuestionado la rentabilidad de este tipo de líneas aéreas en Asia, ya que AirAsia X dejó de operar desde Kuala Lumpur a Londres y París debido al coste del gasoil y por la competencia de otras aerolíneas como Emirates, que ofrecen líneas con servicio completo.

Además, eliminó sus servicios a India debido a los altos impuestos del país, lo que demuestra cuantos factores externos a la compañía pueden afectar en su coste y su rentabilidad.