Durante su interrogatorio, que se ha prolongado durante una hora y diez minutos, Barcoj ha asegurado al magistrado que esta práctica ya existía cuando él ingresó en Caja Madrid en la década de 1980, han informado fuentes jurídicas.

Asimismo, ha alegado que sus gastos correspondían al ejercicio de sus funciones, y ha incluido sus viajes, como uno que realizó al centro de Europa coincidiendo con el cierre del mercado. Barcoj ha llegado a la Audiencia Nacional poco después de las 14:30 horas en taxi, vehículo en el que también ha abandonado el tribunal a las 16.25 horas.

Según la documentación en manos del juez, Barcoj era el principal responsable de la gestión de las tarjetas

Tras su declaración, el antiguo directivo de Caja Madrid ha declinado dar su versión de los hechos. Según la documentación que obra en manos del juez, Sánchez Barcoj no solo era el principal responsable de la gestión de las tarjetas, sino que fue su principal beneficiario, cargando 484.200 euros a Caja Madrid y otros 98.789 a Bankia, que ya devolvió.

También se ofreció a devolver lo sufragado por Caja Madrid a la Fundación del mismo nombre, heredera de la obra social de la entidad, pero terminó por consignar la cifra en una cuenta del juzgado de Andreu.

En el escrito en el que acompañaba el cheque, ya se desligaba de la gestión de esta tarjeta al afirmar que se le entregó como un complemento "muy poco significativo" de su salario y que ya se usaban en los años 1980. Además, subrayaba que es "rotundamente falso" que haya intervenido en la creación de las tarjetas, "oportunidad de su uso, determinación de las personas a las que debía asignarse, límite económico anual y la forma con que habrían de ser utilizadas".