Irene tiene una licenciatura y dos master en comunicación pero para las empresas, no es suficiente. Ya no sabe lo que son los contratos y afirma que lleva seis años trabajando gratis. Contratos en prácticas y de formación por tres euros la hora que pocas veces se convierten en fijos.
“Cuando ya eres un trabajador que se supone que podrías encontrar un trabajo normal, de verdad pues resulta que ya nadie te contrata porque claro, pagar 300 euros está muy bien, pero pagar 1.500 o 1.800 a las empresas les cuesta” comenta Irene.
Durante el último año se firmaron casi 15.000 contratos formativos de los que sólo el 20% pasan a ser indefinidos. Diez puntos menos que en el mismo período del año pasado.
Otro caso es el de Alberto. Es ingeniero industrial y en estos días se le acaba el contrato en prácticas y la oferta de la multinacional para la que trabaja. Afirma que “te ofrecen contratarte en negro por muy poco dinero”. Contratos como los suyos, se han duplicado sólo durante este mes pero los que más suben son los temporales.
Hasta un 91% de los contratos firmados en enero son de este tipo. De los que uno de cada cuatro dura menos de un mes. Es el caso de Marta productora y con cinco años de experiencia pero afirma que “cada vez están tirando más a contratar a gente por horas, por días”.
Todos coinciden: el paro baja pero sus condiciones son cada vez peores.