Varufakis considera que si vence el 'sí' en la consulta que se realizará a los griegos sobre si quieren que el Gobierno heleno firme las condiciones que requieren para el país los acreedores internacionales, tendrán un acuerdo "absolutamente nefasto" mientras que si gana el "no", "no será fantástico, pero no será tan malo".
En este último caso, insiste, el primer ministro griego viajaría el lunes a Bruselas y lograría "un acuerdo mejor". No obstante, el ministro de Finanzas se muestra absolutamente convencido de que sea cual sea el resultado del referéndum de mañana, el lunes habrá un acuerdo. Según el ministro, se perdería un billón de euros si Grecia "se estrella", algo que Europa no se puede permitir porque "es demasiado dinero".
También garantiza que el próximo martes abrirán los bancos en su país, tras el cierre al que se han visto obligados después de que Europa negara una "pequeña extensión del rescate", indica el titular de Finanzas. Según Varufakis, hace cinco meses ya existía un plan "para acabar con un Gobierno que no aceptaba dejarse chantajear por el 'establishment' europeo".
El problema "es que a la UE no le gusta la democracia, asegura Varufakis, que explica que le dijeron "sin paliativos" que la propuesta de acuerdo "era un asunto muy complicado para dejar la decisión final en manos del pueblo griego".