El abuelo de Salvador Ramos, el atacante que mató a 19 niños y dos profesoras en una escuela de Uvalde, en Texas, ha afirmado ante los periodistas que desconocía que su nieto tuviera armas.

Según ha explicado a los medios de comunicación, la abuela del chico, a quien este disparó antes de cometer la masacre y ser abatido por la Policía, "está viva todavía".

En declaraciones a 'ABC News', Rolando Reyes, de 72 años, ha afirmado que no tenía ni idea de que su nieto hubiera comprado dos rifles AR-15 o que los tuviera en su casa. De acuerdo con su relato, el martes por la mañana, antes del mortífero tiroteo, no vio nada inusual que augurara lo que iba a pasar. Según él, su nieto tuvo una pequeña discusión con la abuela sobre la factura de teléfono.

El tirador, de tan solo 18 años, vivía con sus abuelos tras haberse peleado con su madre y ocupaba una de las habitaciones de la casa, donde dormía en un colchón en el suelo, según ha revelado Reyes a la citada cadena.

A preguntas de los periodistas, el abuelo ha confirmado su sorpresa por lo ocurrido y ha negado que hubiera tenido alguna situación así con su nieto en el pasado o que este se hubiera enojado con la abuela. Según ha indicado, "no esperaba" lo que sucedió.

Según el diario 'The Washington Post', que citaba a familiares y amigos del agresor, Ramos era un joven solitario que sufrió acoso escolarpor sus problemas para hablar en la infancia, fue criado en un hogar desestructurado y en los últimos años había tenido reacciones violentas contra personas más cercanas y desconocidos.

'ABC News' recogía que Ramos cumplió 18 años el pasado 16 de mayo y seis días después compró de forma legal dos rifles de tipo AR-15. El martes, irrumpió en la escuela primaria Robb de la localidad texana, donde se habría atrincherado en un aula y matado a tiros a 21 personas.