Argelia ha emitido un nuevo comunicado en el que afirma que seguirá proporcionando gas a España y niega que vaya a suspender las relaciones comerciales entre las dos orillas del Mediterráneo. El país norteafricano lo ha hecho horas después de la advertencia de la Unión Europea, que ha avisado a Argelia sobre posibles represalias si rompía las relaciones comerciales con España respecto al suministro de gas.
El comunicado, en cambio, no se pronuncia sobre los precios, por lo que se desconoce si a pesar de mantener los compromisos podría aumentar el coste. Además, el escrito es muy duro con la Unión Europea: Argelia afirma que la organización supranacional se ha extralimitado al afirmar que Argelia había roto el Acuerdo de Asociación que mantiene con los Veintisiete. Según Argelia, la Unión Europea no se ha puesto en contacto con su diplomacia, una versión que se contrapone a la de fuentes comunitarias, que sostienen que el equipo de Borrell se ha puesto en contacto con los dos gobiernos, español y argelino, para saber qué estaba pasando.
La Unión Europea había avisado al Gobierno de Argel esta misma mañana, tras suspender esta semana el Tratado de Amistad, Buena Vecindad y Cooperación con España por su postura sobre el Sáhara Occidental, haciendo llegar al país norteafricano que estaba dispuesta a "hacer frente a cualquier tipo de medida coercitiva" que tome contra un Estado miembro.
En este sentido, la UE había manifestado su "máxima preocupación" por la ruptura de las negociaciones entre España y Argelia, y había afirmando que, en principio, este hecho podría vulnerar el Acuerdo de Asociación de Argelia con los Veintisiete, tal y como habían expresado el Alto Representante de Política Exterior de la UE, Josep Borrell, y el vicepresidente económico de la Comisión Europea, Valdis Dombrovskis, en un comunicado.
Los responsables comunitarios habían recordado en este sentido que las relaciones bilaterales de terceros países con Estados miembros individuales de la UE forman parte de sus relaciones con la UE: "La unidad y la solidaridad dentro de la UE siguen siendo fundamentales para defender nuestros intereses y valores en nuestras relaciones con todos los países", añadían.
Por su parte, el ministro de Exteriores español, José Manuel Albares ha viajado la mañana de este viernes a Bruselas para reunirse con Dombrovskis por la gravedad de la situación. A la salida del encuentro ha asegurado ante los medios haber "constatado el rechazo de la Unión Europea, de la Comisión y de las instituciones europeas a esta medida unilateral de Argelia". Además, había reiterado la intención del Gobierno de España y la Comisión Europea de que "lo antes posible se vuelva al diálogo, a la amistad que tiene el pueblo de España con el pueblo argelino", restableciendo así "unas relaciones económicas normales entre España y Argelia, entre la Unión Europea y Argelia".