Las disidentes Marta Beatriz Roque y Miriam Leiva han sido detenidas durante unas horas por segundo día consecutivo, para impedir su asistencia a la Plegaria de las Vísperas que presidió el papa Francisco en la Catedral de La Habana, en la segunda jornada de su primera visita a Cuba.

Tanto la expresa política Marta Beatriz Roque, como la periodista independiente Miriam Leiva, han declarado que habían sido invitadas por la Nunciatura Apostólica en La Habana a asistir a esta actividad del Sumo Pontífice.

Según explicó Roque varios oficiales de la policía, entre los que figuraba una mujer, la detuvieron con uso de "violencia" al obligarla a salir del automóvil en el que se trasladaba y seguidamente la condujeron a una unidad donde estuvo detenida unas tres horas.

En el caso de Leiva, la detención se produjo en circunstancias similares, cuando viajaba en un 'almendrón', como se denominan popularmente los autos antiguos privados que funcionan a modo de taxis colectivos. 
"El carro fue interceptado estrepitosamente por la Seguridad del Estado, que me llevaron a una estación de policía, y allí una oficial me advirtió que puedo participar en ninguna actividad de la visita del papa", relató Leiva.

Las disidentes Roque, Leiva y la líder de las 'Damas de Blanco', Berta Soler, también fueron detenidas temporalmente cuando intentaron acudir a la Nunciatura para saludar a Francisco a su llegada a esa sede diplomática vaticana en La Habana, donde se ha hospeda el papa los dos primeros días de su estancia en la isla.

Miembros de la disidencia interna cubana denunciaron decenas de detenciones y arrestos domiciliarios de opositores que han registrado desde que el pontífice argentino inició su visita a Cuba.

Berta Soler ha decalrado que "salimos de la sede de las Damas de Blanco, 23 damas de blanco y Moya fuimos arrestados todos", declaró Soler tras volver a su casa luego de permanecer detenida varias horas en una comisaría de Alamar, su zona de residencia.