El asesinato de Walter Scott por un agente blanco fue una ejecución. La policía de Carolina del sur ha hecho público el vídeo de la cámara del coche patrulla donde el Walter ni le agredió, ni le insultó, ni intentó quitarle la pistola eléctrica al Policía. Sólo salió corriendo, asustado, hasta que el policía le disparó ocho veces por la espalda.