Este fin de semana combatientes del grupo Wagner habrían conseguido adentrarse en la zona industrial de la planta metalúrgica Azom, en la ciudad ucraniana de Bajmut, según anunció el propio jefe de Wagner, Yevgueni Prigozhin.

En caso de que se produjera una batalla allí, la complejidad de la misma recordaría a la de la sidururgia de Azovstal, en Mariupol, dada su estructura de pasadizos y zonas subterráneas.

Desde hace semanas, Bajmut está resistiendo a los embistes rusos. Dentro de la zona ya controlada por Rusia está la plata metalúrgica, donde presuntamente habría soldados ucranianos atrincherados en las galerías subterráneas, aunque Ucrania no lo confirma.

Según el Instituto para el Estudio de la Guerra, las fuerzas rusas podrían intentar un ataque frontal de la planta, altamente fortificada. Un ataque que sería muy costoso, ya que los ataques se producirían en las galerías y comunicaciones subterráneas fortificadas, donde se avanzaría muy lentamente y se podrían producir numerosas bajas.

Según Rusia, las tropas de asalto ya están abriendo camino hacia el interior de la mina y los combates están teniendo lugar a una profundidad de hasta 320 metros, una versión que Ucrania no confirma.