Otro de los puntos clave para desarbolar cualquier nuevo ataque es descubrir el camino de las armas. La investigación tras los atentados de París se centra en el mercado negro en Bélgica, de donde salieron también las armas para la matanza de Charlie Hebdo. El ministro de Defensa francés asegura que se han tomado las medidas necesarias para evitar un ataque químico y destaca la dificultad de utilizar este tipo de armas de un país a otro.