El Gobierno de Joe Biden ha dado permiso a Ucraniapara atacar territorio de Rusia con armas proporcionadas por Estados Unidos, tal y como venía reclamando Kyiv, pero solo cerca del área de Járkiv, donde Moscú está centrando su ofensiva en las últimas semanas.

Así lo han confirmado funcionarios estadounidenses a medios del país y a Efe. "El presidente recientemente ordenó a su equipo que garantice que Ucrania pueda utilizar armas suministradas por EEUU con fines de contraataque en la región de Járkiv, de modo que Ucrania pueda contraatacar a las fuerzas rusas que los están atacando o preparándose para atacarlos", ha apuntado uno de ellos a la agencia.

No obstante, dicha fuente consultada por Efe apostilla que la política con respecto a la prohibición del uso de misiles balísticos ATACMS o los ataques de largo alcance dentro de Rusia "no ha cambiado".

Con esta decisión, la Administración Biden cede a la petición de Ucrania, quien lleva semanas pidiendo a Washington este cambio de política, especialmente desde que comenzó la ofensiva rusa contra Járkiv este mes.

Por tanto, Ucrania ahora puede usar armas proporcionadas por Estados Unidos, como cohetes y lanzacohetes, para derribar misiles rusos lanzados hacia esta zona contra tropas que se concentran justo al otro lado de la frontera rusa o contra bombarderos rusos que lanzan bombas hacia territorio ucraniano. Sin embargo, no puede usarlas para atacar infraestructura civil o lanzar misiles de largo alcance, como el Sistema de Misiles Tácticos del Ejército, para alcanzar objetivos militares en el centro de Rusia.

El miércoles, el secretario de Estado Antony Blinken se convertía en el primer funcionario estadounidense en insinuar públicamente que Biden podría cambiar de rumbo y permitir tales ataques y trasladó a la prensa que la política hacia Ucrania evolucionaría según fuera necesario. El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, no descartó posteriormente un posible cambio.

Debate entre los aliados sobre el uso de armas occidentales contra Rusia

Esos mensajes llegaban después de que los principales aliados de Estados Unidos, como Reino Unido y Francia, dijeran que Ucrania debería tener derecho a atacar dentro de Rusia utilizando armas occidentales.

En este contexto, Rusia ha acusado a la OTAN de abrir una nueva fase de tensión en sus tormentosas relaciones al alentar los ataques ucranianos contra objetivos en territorio ruso con armamento occidental, postura en la que no hay unanimidad en el bloque aliado.

"En los últimos días y semanas los miembros de la OTAN, especialmente Estados Unidos y otros países europeos, han entrado en una nueva fase de escalada de las tensiones. Y lo hacen de manera consciente", afirmó Dmitri Peskov, portavoz del Kremlin.

En los últimos días, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, instó a dar luz verde a Kyiv, llamamiento que fue secundado esta semana por Francia. El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, considera "injusto" no poder usar el armamento occidental para responder a Rusia, pero el primer ministro belga, Alexander De Croo, ya le dijo esta misma semana que los aviones de combate F-16 que le entregará no podrán ser utilizados en el país vecino.