En África, miles de niñas y niños de entre 3 y 18 años son acusados de brujería. Padecer autismo, síndrome de Down o cualquier problema físico puede ser "sospechoso" de estar poseído por el demonio. En el Congo, 70 mil niños han sido víctimas de agresiones para expulsar al "maligno". Hope es uno de estos pequeños al que sus padres echaron de casa y que sobrevive gracias a las sobras de un mercado callejero.
La brujería, un estigma que destroza la vida de niños y mujeres en África