Casi 200 países se han comprometido a reducir en los próximos años el nivel de gases refrigerantes, usados en frigoríficos o aparatos de aires acondicionados, al término del 28 Encuentro de Países Firmantes del Protocolo de Montreal que se celebra en la capital de Ruanda, Kigali.
El acuerdo, anunciado por el ministro ruandés para los Recursos Naturales, Vincent Biruta, modifica el Protocolo firmado en 1987 para preservar la capa de ozono, y podría evitar un calentamiento de 0,5 grados durante este siglo al clasificar a los países firmantes en tres grupos dependiendo de la fecha límite para disminuir el nivel de estos agentes, los hidrofluorocarburos, que pueden llegar a ser hasta 10.000 veces más potentes que el dióxido de carbono.
En virtud de este acuerdo, los llamados "países desarrollados", entre ellos gran parte de los europeos y Estados Unidos, comenzarán inmediatamente sus planes para reducir hasta en un 85% el uso de estos gases para 2036, comenzando con un recorte del 10% para 2019.
"El año pasado en París se prometió mantener el mundo a salvo de los peores efectos del cambio climático. Hoy en día estamos cumpliendo esa promesa", ha declarado el director ejecutivo del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), Erik Solheim, al término de un encuentro donde el secretario de Estado de EEUU, John Kerry, ha operado como gran valedor de un "acuerdo histórico", según sus palabras al abandonar la reunión.