Justin Trudeau se convertirá en el próximo primer ministro de Canadá después de que el Partido Liberal que lidera haya ganado con mayoría absoluta las elecciones, lo que le permitirá gobernar en solitario durante los próximos cuatro años.

El Partido Liberal ha obtenido el 39,7% de los votos emitidos y 183 de los 338 escaños de la Cámara Baja del Parlamento. En segundo lugar ha quedado el Partido Conservador del primer ministro saliente, Stephen Harper, con el 32,1% de los votos y 102 escaños. En tercer lugar se situó el socialdemócrata Nuevo Partido Democrático (NPD) con un 19,2% y 42 diputados.

Harper ha reconocido su derrota poco antes de la medianoche en un discurso que ha pronunciado desde la ciudad de Calgary y en el que ha felicitado a Trudeau por una amplia victoria que nadie había previsto. El Partido Conservador ha obtenido 166 diputados y el 39,6% de los votos en las elecciones de 2011.

Entre los diputados que han perdido su escaño se encuentran varias figuras controvertidas del gabinete de Harper, como su ministro de Finanzas, Joe Oliver; el ministro de Ciudadanía e Inmigración, Chris Alexander, y el secretario del ex primer ministro, Paul Calandra. Harper, que llegó al poder en 2006, reconoció que "el resultado no era lo que esperábamos" y ha dicho que ha ofrecido a Trudeau su "total cooperación" para proceder con la transferencia de poder, lo que normalmente dura entre 10 y 14 días en Canadá.

Al mismo tiempo que Harper pronunciaba su discurso, el Partido Conservador ha emitido un comunicado de su presidente, John Walsh, que ha señaldo que el líder conservador presentará su dimisión. Aunque Walsh no ofreció detalles del proceso si indicó que los diputados electos del Partido Conservador elegirán un líder provisional.

El próximo primer ministro canadiense, Justin Trudeau, ha comparecido ante centenares de seguidores en un hotel de Montreal y ha afirmado que los ciudadanos han decidido que "es el momento para el cambio, el cambio real" y se ha compromeitodo a gobernar para todos los canadienses. Para sorpresa de muchos, Trudeau ha liderado el renacimiento del Partido Liberal, que muchos daban por acabado tras perder tres elecciones consecutivas desde 2006 y que en 2011 quedó diezmado con sólo 34 diputados.