"Condeno, en los
términos más rotundos, el intento de golpe militar en Turquía. El Gobierno
debería ganarse mediante un proceso de elecciones libres y justas, no por la
fuerza", ha subrayado, en un comunicado en el que confía que la situación
se resuelva "pacíficamente".
"Como alguien que
ha sufrido bajo diferentes golpes miliares durante las últimas cinco décadas,
es especialmente insultante ser acusado de tener algún vínculo con esta
intentona. Niego categóricamente las acusaciones", ha remachado.
Erdogan ha acusado
insistentemente en los últimos años a Gulen, su otrora aliado, de urdir un plan
para echarle del poder valiéndose de sus simpatizantes en todos los estamentos
del Estado.
El presidente ha llamado
esta madrugada a erradicar las "estructuras paralelas", término que
suele usar para referirse a los simpatizantes del clérigo.