El tribunal correccional de Bruselas ha considerado a un joven culpable de los delitos de atentados al pudor con violencia y amenazas, difusión de imágenes con carácter pedopornográfico, acoso y violación. El fallo le condena a cinco años de cárcel, pero quedará finalmente en libertad condicional.
El condenado contactaba a través de perfiles falsos en Facebook con jóvenes adolescentes de entre 13 y 16 años a las que convencía para conseguir "favores sexuales". Una decena de ellas aceptaron enviarle fotos desnudas o en posiciones "sugerentes".
También convenció a una de las adolescentes para que le enviase imágenes mientras se masturbaba, algo que el tribunal ha calificado como "violación" aunque no hubiese contacto físico entre los dos. "Incluso aunque no haya ningún contacto físico, es una violación", ha argumentado el tribunal, según recoge la agencia de noticias.
"No había consentimiento y él manipuló a la joven a través de un verdadero chantaje", añade el fallo. El condenado había sido detenido por primera vez en 2015 tras una denuncia presentada por una de sus víctimas y su madre, pero, tras su liberación, continuó con las actividades delictivas durante casi un año, mientas la investigación seguía su curso.