La falta de consenso del jurado popular ha provocado el juicio nulo para un policía blanco que mató de un disparo en la espalda al joven Walter L. Scott, de raza negra, en North Charleston (Carolina del Sur) abril de 2015; un incidente grabado en vídeo por un transeúnte y que desató fuertes protestas de la comunidad afroamericana contra la actuación del agente, Michael T. Slager, por falsear supuestamente el escenario del tiroteo.

A la espera de conocerse si los abogados de la familia de la víctima deciden volver a presentar el caso o si, por el contrario, se llega a un acuerdo a puerta cerrada, Slager permanecerá en libertad tras una resolución que recuerda a casos similares en los que un agente blanco fue acusado de uso excesivo de la fuerza hasta desembocar en un cargo por asesinato.

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Este mismo otoño, un jurado fue incapaz de alcanzar un consenso en el caso de un guardia universitario que mató a un joven motorista negro desarmado en Cincinnati. Lo mismo sucedió en diciembre del año pasado en Baltimore, en el caso de la muerte de otro hombre de raza negra, Freddie Gray.

El agente Slager basó su defensa en que Scott portaba un táser -un arma que proporciona descargas eléctricas incapacitadoras- en la mano. "Es lo único que veo cuando cierro los ojos", declaró Slager desde el estrado la semana pasada, antes de reconocer que, en perspectiva, la situación podría haber concluido de manera "diferente".

Slager aseguró que no recordaba más detalles del incidente, que comenzó con una disputa de tráfico. Algunos de estos detalles, no obstante, están recogidos en un vídeo grabado por el transeúnte Feidin Santana en su teléfono móvil. En las imagenes, Slager y Scott forcejean antes de que el último se de a la fuga. Slager le apunta con el arma y dispara ocho veces. Cinco balas impactaron en el cuerpo de Scott. Una de ellas afectó a sus pulmones y a su corazón y acabó provocando su muerte.

El informe del tiroteo apuntó que Slager y su compañero intentaron resucitar a Scott con masaje cardíaco pero ese momento no aparece en las imágenes. Es más, en ellas se aprecia que el agente se aproxima al cuerpo y deposita su propio táser al lado del cuerpo de Scott. El agente, durante su declaración, fue incapaz de explicar este comportamiento. El testigo, Santana, declaró que Scott en ningún momento arrebató el taser al agente.