Dos hombres han matado a un cura en una iglesia y han dejado a otra persona herida muy grave. Los atacantes han entrado en el edificio, han tomado a seis rehenes y han degollado al sacerdote de 86 años.
Una monja consiguió huir y dar la voz de alarma. "Todo el mundo chillaba: 'Parad, parad, no os dais cuenta de lo que estáis haciendo. Parad, parad'", es lo que ha contado al relatar lo que estaba ocurriendo en el interior de la iglesia.
"Le han forzado a ponerse de rodillas. Él quiso defenderse y ahí es donde comenzó el drama", aseguraba la religiosa.
La policía ha matado a los dos terroristas, según medios franceses. Uno de ellos ya había estado en la cárcel acusado de asociación terrorista. Había salido en marzo y llevaba un brazalete de control.
El presidente, François Hollande, ha dicho que están en guerra con ISIS. "Un cobarde asesinato por dos terroristas que han proclamado ser de ISIS", ha asegurado, antes de afirmar que Daesh les "ha declarado la guerra".