El Ejército de Tailandia protagonizó un golpe de Estado, dos días más tarde de declarar la ley marcial en medio de la crisis política tras más de ocho meses de protestas antigubernamentales. "En el interés de la ley y el orden, asumimos los poderes. Por favor, permanezcan en calma y continúen con sus quehaceres diarios", dijo el jefe del Ejército tailandés, Prayuth Chan-Ocha.