Veinte personas fallecieron en el estado norteño de Uttar Pradesh, el más afectado por la catástrofe, lo que elevaba los muertos a 49 en los últimos días, dijeron fuentes gubernamentales a la agencia local IANS.

Las fuertes lluvias de la última semana y la subida del nivel de los ríos Rapti, Saryu y Ghaghra debido a las precipitaciones en el vecino Nepal han inundado unos 1.500 pueblos en Uttar Pradesh y forzado la evacuación de unas 60.000 personas.

En el distrito de Bahraich es el más afectado con 22 muertos y unos 200 pueblos bajo el agua, los que los equipos de rescate lanzaron desde helicópteros agua y alimentos.

En el vecino estado de Bihar, unas 700.000 personas han resultado afectadas por las inundaciones y el número de muertos se elevó a 19, después de que siete personas murieran el lunes.

En el estado de Uttarakhand el número de muertos por las lluvias y los corrimientos de tierras aumentó a 24 desde el viernes. Nepal también ha sufrido la última semana fuertes lluvias que han causado 101 muertos, 126 personas permanecen desaparecidas y 17.000 familias han abandonado sus hogares.

Los corrimientos de tierra y las inundaciones son habituales en Nepal y en el resto del sudeste asiático en la época de más intensidad de las lluvias monzónicas entre julio y agosto, pero la fuerza de las tormentas de los últimos días ha sido mayor de lo normal.

En junio de 2013, Uttarakhand fue devastado por fuertes precipitaciones que acabaron con la vida de 580 personas y dejaron unos 5.700 desaparecidos.