La Agencia Europea del Medicamento (EMA) recomendó "seguir administrando" la vacuna del COVID-19 de AstraZeneca en la Unión Europea (UE), suspendida por varios países europeos por problemas de coagulación diagnosticados tras la vacunación, ya que considera que "los beneficios de la vacuna siguen superando sus riesgos".
El comité de seguridad (PRAC) de la EMA, que se reunió este jueves para revisar todos los casos de eventos tromboembólicos y otras afecciones relacionadas con coágulos sanguíneos, concluyó que, de momento, "no hay indicios de que la vacunación haya causado estas afecciones, que no se enumeran como efectos secundarios de esta vacuna".
La EMA subrayó que está al tanto de que Dinamarca y otros países europeos han suspendido la vacunación con este fármaco como medida de precaución mientras se está llevando a cabo una investigación completa sobre los incidentes reportados en la Unión Europea.
Investigan casos de trombosis
Algunos países europeos, como Italia o Noruega, han anunciado la suspensión del uso de la vacuna de AstraZeneca contra el COVID-19, después de que Dinamarca hiciera lo mismo al registrar graves casos de trombos en personas que la habían recibido. La Dirección General de Sanidad danesa había comunicado horas antes la suspensión por 14 días de la vacuna aplicando un principio de "precaución", al haberse producido también un muerto, aunque todavía no se ha podido demostrar una relación directa.
"Vamos a esperar a ver si hay alguna conexión entre la vacuna y esos casos de trombos", ha aseverado el director de infecciones del Instituto de Salud Pública (FHI) noruego, Geir Bukholm. Noruega, que forma parte del Espacio Económico Europeo pero no de la Unión Europea, no ha registrado casos de trombos en personas que han recibido esa medicación, pero ha decidido paralizar su uso hasta que la Agencia Europea del Medicamento (EMA) estudie los informes sobre problemas de coagulación diagnosticados en varios países.
La EMA había asegurado ayer en un análisis preliminar que no creía que hubiera un problema específico con un lote de AstraZeneca retirado el domingo por Austria como medida de precaución, tras la muerte de una persona diagnosticada con trombosis múltiple y la enfermedad de otra coincidiendo con su vacunación. Estonia, Lituania, Letonia y Luxemburgo también suspendieron la inmunización con las dosis de ese lote en concreto, que fue recibido por 17 países de la Unión Europea, incluidos España, Polonia, Malta, Francia y Grecia, según la EMA.
A diferencia de sus vecinas Noruega y Dinamarca, Suecia ha rechazado sin embargo detener de forma temporal el uso de esa vacuna. "Creemos que no hay base suficiente para suspender la vacunación con AstraZeneca", dijo hoy en la rueda de prensa de las autoridades sanitarias Veronica Arthurson, de la Agencia Sueca del Medicamento.
Londres defiende que es "segura y efectiva"
El Gobierno británico ha defendido que la vacuna desarrollada por AstraZeneca es "segura y efectiva", después del revuelo generado. Un portavoz oficial del primer ministro, Boris Johnson, ha insistido ante los medios de comunicación que el Reino Unido continuará aplicando su programa nacional de vacunas, en el que están incluidas la creada por la citada farmacéutica en conjunto con la Universidad de Oxford y la desarrollada por Pfizer/BioNTech.
"Hemos sido claros en que (el preparado de AstraZeneca) es a la vez seguro y efectivo y cuando se pide a los ciudadanos que vengan a ponérselo, deberían hacerlo con confianza", reiteraba.