El Gobierno de Estados Unidos decretó la imposición de sanciones económicas contra Rusia por los ataques cibernéticos que atribuye a ese país durante la pasada campaña de las elecciones presidenciales estadounidenses.
Además, el Gobierno del presidente Barack Obama ha decidido expulsar a 35 funcionarios rusos e imponer sanciones a dos de los más destacados servicios de inteligencia de ese país.