Las ciudades europeas toman cada día más medidas para frenar el avance del cambio climático. Uno de los factores que afecta de manera más notoria a este proceso que engloba múltiples causas es el del transporte por carretera. El auge de los coches híbridos o eléctricos marca un futuro cada vez más alejado del diésel o la gasolina. Sin embargo, muchos expertos en la industria creen que estos combustibles pueden seguir impulsando vehículos y buscan mejoras en su funcionamiento para mitigar la contaminación que puedan llegar a producir.

La Unión Europea (UE) aboga por buscar ciudades cada vez más sostenibles en las que reducir el tráfico y bajar los niveles de emisiones nocivas para el medio ambiente. Así, la Comisión Europea reunía a los diferentes ministros de Transporte europeos a finales de 2023 para fijar los acuerdos en torno a la Estrategia de Movilidad Inteligente y Sostenible.

Un compromiso europeo contra el cambio climático

Con ello, desde España se ha desarrollado la Ley de Movilidad Sostenible para perseguir lo fijado en la estrategia de la Unión Europea. Esta ley entrará en vigor en España a finales de 2024 y permitirá que el país se ahorre unos 800 millones de euros al año en gastos derivados del transporte, además de ayudar al Gobierno a cumplir con los objetivos acordados en el paquete 'Objetivo 55' que da forma en el ámbito legal al Pacto Verde europeo.

En el Acuerdo de París, los países de la Unión Europea se comprometieron a frenar el avance del cambio climático de manera considerada de aquí a 2050. Así, dentro del 'Objetivo 55' se recoge el compromiso de ir reduciendo en los próximos seis años la emisión de gases de efecto invernadero. Por este motivo, muchas alarmas se han encendido al creer que para entonces (incluso antes) ya no será posible comprar ni conducir coches de combustión.

Desde la página web del Parlamento Europeo, Jan Huitema, autor del Informe sobre emisiones de los automóviles, puntualiza sobre estas nuevas normas de la UE: "No estamos diciendo que tenga que vender su coche y comprarse uno nuevo. Solo decimos que, en 2050, nos gustaría que el sector del transporte fuera neutro en carbono" y aclara que "lo que queremos conseguir con esta legislación es que conducir coches eléctricos no solo esté al alcance de los ricos, sino que las demás personas también se puedan permitir un vehículo eléctrico. Hasta 2035 tenemos 13 años, y los fabricantes de coches ya dicen que es factible introducir en el mercado coches nuevos de cero emisiones."

¿Cuándo se prohíben los coches de combustión?

El año que se ha definido para prohibir la venta de coches de combustión es 2035. Al menos esa ha sido la fecha propuesta por la Unión Europea como inicio del cambio. Sin embargo, esta cita sigue siendo susceptible de sufrir modificaciones: en 2027 la Comisión Europea volverá a evaluar si, para entonces, existen las condiciones habilitantes para frenar la venta de este tipo de vehículos.

Esta medida procedente de la UE preocupa a la industria del automóvil española, que en 2023 se consolidaba como la segunda potencia automovilística en Europa y la octava del mundo. El freno de los coches diésel y gasolina frente al auge de coches híbridos, eléctricos o con otro tipo de combustibles más sostenibles puede afectar de lleno en el sector automovilístico que no encuentran la solución en la sustitución de unos modelos por otros.

Por el momento, ciudades europeas como Madrid y Barcelona se han puesto manos a la obra para iniciar este proceso de mejora de la calidad del aire y la vida de sus ciudadanos.

Madrid y Barcelona, a la cabeza del nuevo plan de Movilidad

El peso de esta nueva Ley de Movilidad Sostenible no va a recaer única y directamente en los vehículos particulares. Desde España se están promoviendo, al hilo de lo que manda Europa, diferentes medidas que afectan al transporte y pretenden reducir el tráfico en ciudades grandes como Madrid o Barcelona.

La Ley de Movilidad recoge por primera vez la movilidad sostenible como derecho social, por lo que propone que figuren en el Sistema Nacional de Movilidad Sostenible medidas como:

  • Dotar al transporte público de vehículos libres de carbono.
  • Sumar Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) para las ciudades de más de 50.000 habitantes.
  • Más transporte de mercancías por tren para reducir los que se realizan por carretera.
  • Apuesta por el teletrabajo o el uso del transporte público en empresas de más de 500 trabajadores.

En lo que respecta al coche, estas son las medidas que pueden influir de manera más notoria en los conductores y propietarios de vehículos:

¿Qué va a cambiar en las Zonas de Bajas Emisiones?

En diciembre de 2022 el Consejo de Ministros aprobaba el Real Decreto 1052/2022 que regula las ZBE en España, en las que se delimitan "restricciones de acceso, circulación y estacionamiento de vehículos para mejorar la calidad del aire y mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero", al menos así lo indica en su artículo 14 la Ley de Cambio Climático y Transición Energética.

Ciudades como Madrid y Barcelona, pero también Córdoba, Coruña o Sevilla entre otras ya han aplicado esta normativa, que ha conseguido reducir el nivel de contaminación en algunas de sus zonas gracias -en parte- a esta nueva medida.

¿Cómo repercute esto en el ciudadano? Más allá de gozar de una mejor calidad del aire, como conductor verá su acceso restringido a estas Zonas de Bajas Emisiones en función del tipo de vehículo que conduzca y de la etiqueta medioambiental que posea.

El fin de los coches sin distintivo ambiental y con etiqueta B

En este sentido, Barcelona ya ha comenzado a dar los primeros pasos hacia el próximo nivel. En su último Plan de Calidad del Aire, el Gobierno de Cataluña fijaba 2028 como el año en el que, con gran probabilidad, ya no podrán circular vehículos con etiqueta B por sus Zonas de Bajas Emisiones.

Madrid, por su parte, ya prohibía en 2024 la circulación de aquellos vehículos que no estuvieran empadronados en la ciudad y que no tuvieran distintivo medioambiental. La ciudad espera que, para 2025, no circule ningún coche sin distintivo por sus calles, esté empadronado o no (salvo que sea considerado vehículo histórico).

Coches de combustión vs coches eléctricos

En la actualidad resulta cada vez más frecuente ver puntos de recarga para coches eléctricos en espacios públicos y esto es -en gran medida- gracias al plan de la Unión Europea, específicamente representado en el artículo 4 del Real Decreto-ley 29/2021 por el que, desde 2023, aquellos parkings que no sean residenciales deben contar con estos puntos de carga de manera obligatoria.

Así apuestan UE y España por el futuro del coche... Siempre y cuando sea eléctrico y/o sostenible. Con argumentos a favor y en contra, la Ley de Movilidad Sostenible pretende favorecer la compra de este tipo de vehículos disminuyendo las trabas con las que se encuentran sus conductores.

A fin de cuentas, lo que promueven tanto Unión Europea como el Gobierno español con estas medidas es que reduzca el uso del transporte por carretera y sus consecuentes emisiones de CO2, que se ven incrementadas en aquellos vehículos con más años de vida.