Fue breve, apenas cinco segundos, pero la intención es lo que cuenta y la imagen es real. Joe Biden se puso la gorra de la campaña de Donald Trump en la cabeza. Fue durante un acto en Pensilvania, por el aniversario del 11-S y ante seguidores 'trumpistas' que le increparon en todo momento.

En la imagen se puede ver como el presidente estadounidense bromea con uno de los seguidores republicanos: "Yo te daré mi gorra presidencial ¿Quieres que te la firme?". La respuesta del seguidor del expresidente no pudo ser más violenta: "¿Recuerdas tu nombre?". Pero Biden no se dejó llevar por la situación y se atrevió a bromear: "No recuerdo mi nombre, soy lento". Tras otro intercambio de bromas e improperios, el demócrata se ganó a la masa republicana colocándose la gorra de la campaña de Trump y parodiando al candidato: "No coman perros ni gatos".

Desde la Casa Blanca explican que este gesto es una muestra de unidad, para que demócratas y republicanos vuelvan a hermanarse, como ocurrió tras los atentados del 11S. Un mensaje al que la campaña republicana le ha dado la vuelta y ha aprovechado la foto para darle las gracias al presidente por el apoyo.