La vuelta a la normalidad está muy cerca y esta vez es literal. En la vecina Gibraltar el toque de queda pasa a ser historia a partir de la medianoche de este jueves y la mascarilla dejará de ser obligatoria en las calles desde el domingo.
¿Cómo lo han conseguido? Cuestión de cifras. El 90% de su población ya está vacunada y la incidencia de la pandemia se ha reducido hasta prácticamente desaparecer. Además, la colonia británica sólo permite las conexiones aéreas con un destino: Reino Unido. El ministro principal Fabián Piccardo se mostraba orgulloso hace días de los buenos datos, fruto según él, del estricto confinamiento y de la rápida inmunización.
Sólo un 10% de los 26.000 residentes de El Peñón están pendientes de recibir la inyección. Inyección que también están recibiendo, sin distinción por rango de edad, los trabajadores trans-fronterizos inscritos en el registro oficial de trabajadores: unos 1.700.
Con estas cifras, el toque de queda desaparece. Así, los bares y restaurantes podrán abrir hasta las dos de la madrugada. El consumo de alcohol en lugares públicos, es decir fuera de espacios con licencia, continuará prohibido durante las noches, desde las 19:00 horas a las 8:00 de la mañana.
En cuanto al uso de la mascarilla, a partir de las 23:59 del próximo sábado ya no será obligatorio utilizarlas en los espacios exteriores de la Calle Real (Main Street) y sus alrededores, aunque seguirá siendo necesario llevarla en espacios públicos cerrados, comercios y transporte público.