Este lunes 24 de julio, el Parlamento israelí ha aprobado una controvertida cláusula del proyecto de reforma judicial en medio del boicot opositor. Y en medio de nuevas movilizacionesproducidas este pasado fin de semana a nivel nacional contra los planes del Ejecutivo del primer ministro de país, Benjamin Netanyahu. Dicha clausula es conocida con el nombre de 'cláusula de sensatez'.

La votación ha obtenido 64 votos a favor (0 en contra) después de que los parlamentarios de todos los partidos opositores decidieran abandonar el pleno de la Knesset ante la insistencia del Gobierno de sacarla adelante, tal como ha informado el diario israelí 'Haaretz'. Se trata de una cláusula que habilita a los tribunales a anular una decisión del Gobierno si considera que va en contra del sistema democrático, tras el colapso de las conversaciones entre el Ejecutivo y la oposición.

De modo que, poco antes de la votación, Yoav Gallant y Yariv Levin, ministros de Defensa y Justicia respectivamente, han mantenido una fuerte discusión entre gritos de "vergüenza" desde las bancadas opositoras. El propio Gallant ha hablado después con el líder del opositor Yesh Atid, el ex primer ministro Yair Lapid, sin más detalles.

Así, los esfuerzos de última hora para enmendar el proyecto de la cláusula o lograr reactivar las conversaciones entre el Gobierno y la oposición se han demostrado infructuosos, después de 30 horas de debate sobre la misma, que han incluido el rechazo a 140 reservas presentadas por la oposición.

Inmediatamente después de la votación, Bezalel Smotrich, ministro de Finanzas ha aplaudido el resultado y ha argumentado que la coalición "ha hecho todo lo posible hasta el último momento, pero desafortunadamente la oposición se ha opuesto", tal y como ha recogido por su parte el diario 'The Times of Israel'.

Por su parte, Levin ha ensalzado lo que ha descrito como "un primer paso en un proceso histórico para corregir el sistema judicial", mientras que Netanyahu se ha ido del pleno sin hacer declaraciones después de votar. 'Bibi' había llegado poco antes tras recibir el alta después de someterse a una cirugía el domingo para que le colocaran un marcapasos.

La sesión se ha celebrado en medio de una concentración por parte de miles de personas frente a la sede de la Knesset para protestar contra el proyecto, entre acusaciones sobre un supuesto plan de las autoridades para dar un "golpe" institucional a través del proyecto de reforma. La Policía ha usado cañones de agua durante la protesta, que se ha saldado con al menos doce detenidos y cinco manifestantes heridos de levedad.

Antes de la votación, Smotrich ha denunciado que "un cerco violento destinado a evitar que los miembros de la Knesset ejerzan su derecho y deber a votar en el pleno no es democracia". "Esto es el Capitolio", alertó, en referencia al asalto registrado el 6 de enero de 2021 por parte de seguidores del expresidente estadounidense Donald Trump que rechazaban el resultado de las elecciones de noviembre del año anterior, en las que se impuso el candidato demócrata y actual mandatario, Joe Biden.

El presidente estadounidense, Joe Biden, ha reclamado en las últimas horas a Netanyahu que "no se apresure" a la hora de sacar adelante la reforma y ha sostenido en declaraciones al portal Axios que "parece" que la propuesta del Gobierno "se está volviendo más divisiva, en vez de menos".

Los críticos con la reforma judicial argumentan que se trata de un ataque al equilibrio de poderes de Israel, fundamentalmente a las bases en las que se asienta la democracia, ya que concede al Parlamento una influencia inusitada para revocar decisiones judiciales.