El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha señalado que "todos los indicios apuntan" a que el conductor que ha matado con un camión a cuatro soldados y herido a otras 15 personas en Jerusalén Este tenía afinidad por Daesh.

Las fuerzas de seguridad de Israel han detenido al menos a cinco familiares del palestino que ha matado a cuatro soldados israelíes tras arrollarles de forma deliberada en Jerusalén Este. Las fuerzas israelíes han realizado registros en el barrio de Jabel Mukabar, en el que residía el atacante, identificado como Fadi al Kanabir, de 28 años.

Shadia, una de las hermanas de Al Kanabir ha asegurado que entre los detenidos está la esposa del atacante, sus padres y dos de sus hermanos, según ha informado la agencia palestina de noticias Maan.

Shadia ha agregado que las doce hermanas de Al Kanabir fueron interrogadas en el patio de la vivienda antes de ser citadas para otro interrogatorio en una comisaría de Jerusalén.

Por su parte, la portavoz de la Policía israelí, Luba al Samri, ha confirmado que en las operaciones han sido detenidos nueve sospechosos, entre ellos cinco familiares del atacante.

El ataque ha tenido lugar en la colonia de Talpiot, donde un palestino ha arrollado a un grupo de personas que se encontraban esperando para subirse a un autobús frente a una base militar.

Uno de los heridos más graves es una mujer que ha sido trasladada al hospital de Shaare Zedek, inconsciente. El resto de los heridos, 14, han sido repartidos entre este hospital y el centro médico de Shaare Zedek, cuatro de ellos en estado grave y diez con pronóstico leve.

Según un conductor de autobuses israelí, testigo del incidente, el camión arrolló a un grupo de soldados y llegó incluso a dar marcha atrás para rematar a los heridos. El conductor del camión acabó sucumbiendo por los disparos recibidos, de acuerdo con fuentes policiales.

El portavoz de la Policía israelí, Micky Rosenfeld, ha descrito el incidente como un "ataque terrorista" y ha confirmado que la zona ha sido acordonada. Posteriormente, una portavoz confirmó la naturaleza del suceso "sin género de dudas".